Iniciar un pequeño negocio siempre se siente como una apuesta, incluso cuando las condiciones económicas son favorables. Con tanta incertidumbre, ¿es ahora el momento adecuado para emprender?
- No dejes que el miedo económico te impida emprender. Una idea de negocio bien planificada y estudiada puede triunfar incluso en una economía desafiante.
- Antes de lanzar tu proyecto, enfócate en crear un sólido plan de negocios, validar la demanda de mercado para tu producto o servicio y realizar un análisis de la industria.
- Investiga opciones de financiamiento y asegúrate de tener los recursos necesarios para poner en marcha tu empresa, incluidos tecnología y personal.
Iniciar un negocio siempre parece una apuesta arriesgada, incluso cuando la economía está en buena forma. Sin embargo, en este momento, muchas personas están preocupadas por la economía, y el 65% cree que está en un estado poco favorable o en declive.
Con tanta incertidumbre, podrías preguntarte si este es el mejor momento para iniciar un negocio. Pero la verdad es que nunca existe un momento perfecto, y las fuerzas externas siempre amenazarán tu idea.
El «mejor» momento para emprender llega con estrategia, investigación y la mentalidad correcta. Así que si tus números son sólidos, no dejes que el miedo económico retrase tus planes.
1. Plan de negocios
Un plan de negocios puede ayudarte a determinar si iniciar un negocio es la decisión correcta. También te permitirá identificar nuevas oportunidades, aclarar tu estrategia y evaluar si tu idea es viable.
Si tienes varias ideas diferentes, redactar un plan de negocios te ayudará a evaluar cuáles tienen mayores probabilidades de éxito. Además, te obligará a invertir tiempo en investigar a tu público objetivo y a tus competidores.
Lo más importante es que un plan de negocios puede ayudarte a identificar debilidades en tu modelo de negocio. Esto te permitirá detectar posibles problemas y evitar errores costosos en el futuro.
La mayoría de los inversores querrán ver un plan de negocios antes de financiar tu proyecto, y también lo necesitarás para calificar para un préstamo. Escribir un plan de negocios también te ayudará a comunicar tu visión a nuevos empleados, lo que podría facilitar el proceso de reclutamiento.
2. Demanda de mercado
Aproximadamente el 42% de las startups fracasan porque los fundadores crearon un producto que nadie quería. Es fácil emocionarse con una nueva idea de negocio y olvidar verificar si el producto encaja en el mercado.
Antes de lanzar un nuevo negocio, debes considerar la demanda de mercado. La demanda de mercado es la cantidad de un producto o servicio que los clientes están dispuestos a comprar a un precio específico. Esta demanda está influenciada por varios factores, como el precio, las condiciones económicas y las preferencias de los consumidores.
Identificar la demanda de mercado te ayudará a determinar el potencial de ventas y de ingresos. También te permitirá desarrollar una estrategia de precios, elegir a tu cliente objetivo e identificar oportunidades de crecimiento.
Si realizas un análisis de mercado y detectas una demanda, también debes considerar el tipo de demanda. Por ejemplo, podrías identificar una demanda irregular, es decir, una demanda basada en la estacionalidad o en condiciones económicas a corto plazo.
Muchas empresas experimentaron esto durante la pandemia de COVID-19 y vieron cómo la demanda disminuía cuando las condiciones económicas cambiaron. Peloton es un ejemplo claro: los ingresos de la empresa se dispararon en 2020 y 2021, lo que llevó a la compañía a invertir fuertemente en inventario. Cuando la demanda cayó, Peloton se quedó con un exceso de stock. En lugar de interpretar el crecimiento inicial como un cambio temporal, la empresa actuó como si ese crecimiento fuera a continuar indefinidamente.
3. Tu industria
Un análisis de mercado implica estudiar a los clientes a los que venderás tus productos o servicios. En cambio, un análisis de industria se enfoca en las diferentes empresas dentro de ese sector. Deberás examinar el estado actual de la industria, sus patrones de crecimiento y las proyecciones de ingresos.
Por ejemplo, ¿estás entrando en una industria emergente o en una ya bien establecida? Ambos escenarios tienen sus pros y contras. Las industrias emergentes, por ejemplo, suelen tener menos competencia y un alto potencial de crecimiento.
Sin embargo, tendrás que dedicar más tiempo a educar a tus clientes, ya que no estarán familiarizados con el producto o servicio. Además, como la industria es nueva, es difícil anticipar qué tipos de regulaciones gubernamentales podrían surgir en el futuro.
Si una industria ya está bien establecida, tiene un historial comprobado de éxito. Sin embargo, generalmente también enfrenta una mayor competencia y una barrera de entrada más alta.
4. Recursos necesarios
No puedes iniciar un negocio sin recursos, aunque tus necesidades variarán según el tipo de empresa que estés lanzando. Al principio, tu recurso más importante es el financiamiento, pues todo negocio necesita dinero para operar. Hay formas de reducir costos, pero toda startup incurre en una variedad de gastos. Veremos cómo acceder al capital necesario en la próxima sección.
También necesitarás acceso a las soluciones tecnológicas adecuadas, ya que la tecnología hace que tu negocio sea más flexible y adaptable. La mayoría de las startups requieren un sitio web responsivo, soluciones de almacenamiento en la nube, herramientas de ciberseguridad y una forma de recopilar y analizar datos.
Finalmente, en algún momento tendrás que invertir en empleados. Puede que logres poner en marcha el negocio por tu cuenta, pero si deseas construir una empresa escalable, necesitarás encontrar y desarrollar un equipo adecuado.
5. Acceso al capital
Los emprendedores pueden acceder al capital de tres maneras principales: autofinanciación, inversores externos o préstamos para pequeñas empresas. La autofinanciación te permite evitar deudas o ceder participación en la empresa, pero es más difícil ganar tracción de esta forma. Puede que necesites mantener tu empresa a flote durante varios años antes de poder escalar con éxito.
Los inversores externos pueden ser una buena opción, pero esta alternativa está volviéndose menos accesible para las startups. Los fondos de capital de riesgo cayeron un 60% entre 2022 y 2023, y la financiación para startups se redujo en un tercio. No se espera que las tasas de interés bajen significativamente en 2024, por lo que es probable que esta tendencia continúe.
Otra opción para las startups es solicitar un préstamo para pequeñas empresas. Los bancos suelen tener criterios de préstamo estrictos, lo que hace que los prestamistas no bancarios sean una excelente alternativa. Los prestamistas en línea y los marketplaces de financiación ofrecen un proceso de solicitud simplificado, requisitos menos rigurosos y acceso rápido al capital.
Iniciar un negocio en tiempos económicos inciertos puede parecer intimidante, pero con planificación cuidadosa, pensamiento estratégico y la mentalidad adecuada, puedes posicionar tu nueva empresa para el éxito. Recuerda que nunca habrá un momento perfecto o «ideal» para iniciar un negocio, y los desafíos económicos forman parte del camino. Al desarrollar un plan de negocios sólido, comprender la demanda del mercado, analizar tu industria, asegurar los recursos necesarios y explorar diversas opciones de financiamiento, podrás superar estos desafíos y convertir tu visión emprendedora en realidad.
Fuente: Joseph Camberato /entrepreneur.com